viernes, 28 de octubre de 2022

Un gran tesoro


 


 

                                                          -I-

                                                 Diez citas

 

1.“Son coeur est un luth supendu: sitôt qu´on le touche il résonne”(1)

2.“El artista es el creador de cosas bellas. Revelar el arte y ocultar al artista   

     es la finalidad del arte”

3.“Jorge Duroy salió del restaurante tras recibir de manos de la cajera la  

     vuelta de sus cinco francos…Una vez en la acera, Duroy permaneció un

     instante inmóvil preguntándose qué haría. Se encontraba a 28 de junio y

     solamente le quedaban tres francos con cuarenta céntimos en el bolosillo

     hasta final de mes. Esto representaba dos cenas sin almuerzos o dos

     almuerzos sin cena”

4.“Acabo de visitar al propietario de la casa donde tengo mi domicilio, el  

     único vecino que vendrá a turbar mi soledad…Y precisamente, el señor   

     Heathcliff y yo somos un par de solitarios de temperamento muy

     adecuado para vivir en esta región desierta”

5.“Durante la guerra federal de los Estados Unidos, se estableció en

      Baltimore, ciudad del Estado de Maryland, una nueva sociedad de

      mucha influencia…Simples comerciantes y tenderos abandonaron su

      despacho y su mostrador para improvisarse capitanes, coroneles y hasta

      generales sin haber visto las escuelas de West Point”

6. “En el centro de la habitación, sujeto sobre un recto caballete, estaba el

      retrato en tamaño natural de un joven de extraordinaria belleza”

7.“A lo largo de todo un pesado, sombrío, sordo día otoñal, cuando las

     nubes se ciernen agobiosamente bajas en el cielo, yo había ido cruzando,

     solo, a caballo, por un terreno singularmente lóbrego de la campiña. Y,

     al fin me hallé, cuando las sombras de la tarde iban cayendo, a la vista de

     la melancólica mansión de los Usher”

8.“Me entretuve en derredor de aquellas tres tumbas, bajo la bóveda celeste

     plateada, acariciado por la suave brisa que difundía aromas por el  

     campo. Medité entonces el hecho extraño de que pudiera haber quien

     atribuyera un descanso inquieto a los que dormían su sueño eterno en

     aquella tierra tan sagrada y tranquila”

9.“Las condiciones mentales que suelen juzgarse como analíticas son, en sí

      mismas, muy difíciles de analizar…Un caso espeluznante y

      tremendamente difícil de resolver, llevan al joven Auguste Dupin a

      mostrar sus increíbles facultades detectivescas, su gran mente

      deductiva y analítica”

10.“Al entrar encontraron, colgado de la pared, un espléndido retrato de su

        amo, tal como lo habían visto últimamente, en toda la maravilla de su

        exquisita juventud y de su belleza. Tendido sobre el suelo había un

        hombre muerto…Estaba ajado, lleno de arrugas y su cara era

        repugnante…”

 

(1) “Su corazón es un laúd suspendido: apenas lo tocan resuena”

 

 

 


                                                      -II-

                                       Mi tesoro

 

Mis padres alquilaron la casa al final del verano. Era una casa típica de pueblo extremeño, con dos plantas. Abajo, las habitaciones a ambos lados de un largo pasillo que daba al corral, donde se encontraban la cocina y la cuadra. En la segunda planta, había dos estancias, una a cada lado de la escalera. la de la derecha era el típico sobrado dedicado a almacén de paja y piensos para los animales. La de la izquierda, servía de trastero. En ella se amontonaban toda clase de cachivaches y objetos varios ya inservibles. Yo tenía dieciséis años y estaba estudiando el bachillerato en la ciudad.

                          

No llevábamos ni un año viviendo en la casa cuando llegué a primeros de julio con las vacaciones de verano. Tenía por delante tres largos meses para disfrutar de la libertad que da el pueblo. Una mañana, después de desayunar, subí a la planta superior a curiosear. Allí había de todo: trastos viejos, aperos de labranza, juguetes rotos, muebles desechados...Y entre todo aquello, me llamó la atención una caja de cartón atada con una cuerda de pita.

La estuve mirando largo rato hasta que no pude resistir más la tentación y decidí abrirla. Desaté la cuerda muy despacio, abrí las solapas y allí estaban ante mí. Eran libros, sólo libros. Pero en ese momento de mi vida, ninguna otra cosa me habría producido tanta alegría como el hallazgo de estos libros ya que una de mis mayores pasiones por esa época era la lectura. Y, en contra de lo que ocurre en la actualidad, por entonces, el acceso a los libros de lectura no era tan fácil, al menos para una familia de clase humilde como era la mía. Hasta el colegio religioso donde estudiaba, aunque pueda parecer mentira, carecía de biblioteca.

 

Comencé a sacarlos de la caja con mucho cuidado, como si de un material frágil se tratara. A cada uno de ellos les fui limpiando el polvo acumulado sobre sus tapas, mientras leía el título y el nombre

del autor. Luego los acariciaba como si de objetos animados se tratase. Eran en concreto seis libros y, desde ese mismo momento, me prometí a mí mismo leerlos todos, uno por uno, página a página, línea a línea. Y así fue. Ellos fueron mis primeros libros y, tal vez por eso, quedaron tan grabados en mi memoria y en mi alma que, a pesar de que luego he leído mucho a lo largo de mi vida, nunca me encontré con un libro que me hiciera vibrar con su lectura como me hicieron vibrar aquellos seis ejemplares. Ningún otro libro ha llenado mi ser de tantas emociones, de tantos sentimientos como entonces. Y es que aquellos seis libros fueron y son mi tesoro porque aún los conservo casi todos (me los regaló amablemente la dueña de la casa).Y de vez en cuando los releo para recordar que hubo un tiempo ya lejano en que la felicidad para mí consistía en leer, en sumergirme en historias mágicas y maravillosas que me hacían soñar con otros mundos.


He aquí las piezas de aquel tesoro. Es posible que hayáis leído alguno de ellos o tal vez todos. Y hasta puede que alguno no os parezca gran cosa. Pero para mí, desde ese mismo instante, no hubo ya libros como estos:

 

                                                   

1.Bel Ami - Guy de Maupassant (Ed. Círculo de Lectores-1970)

 

 -Desde la primera página ya empezó a caerme simpático este tipo. Era tal su desfachatez, sus ganas de comerse el mundo, que no se paraba en mientes y no existía obstáculos por difíciles o delicados que fueran que le impidieran seguir su camino hacia la gloria.

  Aprovechando y jugando bien sus mejores cartas como eran la elegancia en el trato o su imponente físico, consiguió ascender peldaños hasta alcanzar la deseada cima que se propuso.

  Jorge Duroy (Bel Ami)  fue, para mis 15 años, un héroe. Un vividor, un pillo, todo lo que yo soñaba ser algún día, aunque sabía con certeza que yo nunca sería capaz de actuar como él pues me faltaban todas sus cualidades, desde el físico al descaro, desde el don de gentes hasta la elocuencia. Aún así, soñaba en ser algún día como Jorge Duroy.

 

  “Es esta una novela extraña y sorprendente, de esas obras que se leen con interés, con agrado y hasta con entusiasmo y admiración. Pese a los años que cayeron sobre ella (editada como folletín en 1885), continua tan fresca y lozana como el primer día”

(Cita 3)



2. Cumbres borrascosas-Emily Bronte (Ed. Rodgar-Barcelona-1969)

 

  -Ya en las primeras páginas de esta novela única y maravillosa, me enamoré yo de Catalina Earnshaw, de Catalina Linton, de Catalina Heathcliff…Tres apellidos y una sola mujer. Una mujer dura y romántica a la vez, como  la novela. Delicada y fuerte como el páramo donde habitaba. Su vida y andanzas me llegaron a lo más profundo de mi alma sedienta de sensaciones. La novela me atrapó desde la primera página y ya no pude dejar de leer.

Bendita señora Dean que se prestó a contar toda la historia a su recién llegado inquilino, el señor Lockwood, hombre solitario pero tan curioso que no paró hasta conocer todos los entresijos de las dos familias vecina que habitaron tiempo atrás el solitario  páramo de la campiña inglesa.

Cumbres borrascosas es la única novela que escribió su autora, Emily Bronte. Pero, a pesar de ello, es una obra maestra reconocida en todo el mundo y traducida a casi todos los idiomas que existen.

(Citas 4 y 8)

 


3.De la Tierra a la Luna-Julio Verne (Ed.Libra S.A.-1970)

 

    -Todo empezó en el Gum-Club, un club de hombres emprendedores, decididos y capaces, si se lo proponían, de alcanzar la Luna, como así fue.

Cálculos casi exactos, actividad febril e infinita sed de aventuras hicieron de esta hazaña un portento de imaginación y sabiduría por parte del autor, Julio Verne, consagrado ya cuando escribió esta epopeya de navegantes estelares.

El regreso de tamaña aventura supuso uno de los finales más emocionantes de la literatura de todos los tiempos.

 (Cita 5)



4. El retrato de Dorian Gray-Oscar Wilde (Ed. Salvat RTV-1970)

 

La lectura de El retrato de Dorian Gray me produjo, al comienzo del libro, una mezcla de sensaciones entre las que se pueden citar la envidia, la pasión por la juventud y la belleza o el deseo vehemente de poseer la elegancia y la cultura de los personajes retratados por el gran Oscar Wilde. Pero, a medida que avanzaba por sus páginas, fui cambiando de parecer y comencé a entender que todo aquello que no sea vivir en tu propia piel las distintas etapas de la vida, las buenas y las no tan buenas, es una aberración que nunca nos permitirá ser felices, como tampoco se lo permitió al protagonista de la novela que terminó suplicando volver al estado normal que debería tener de acuerdo con su edad. La belleza y la eterna juventud terminaron por matarlo ya que ambas cosas vividas eternamente es algo insoportable para cualquier mortal.
(Citas 2,6 y 10)

 


5. Narraciones extraordinarias-Edgar Allan Poe (Ed. Salvat RTV-1969)

 

Edgar Allan Poe me deslumbró. Sus Narraciones Extraordinarias lo son de verdad pues ellas me hicieron sentir auténtico miedo en “La caída de la casa Usher”, intriga y ansiedad en “Los asesinatos de la Rue Morgue”, angustia  en “El pozo y el péndulo”, tensión en “El corazón delator”…Todo un compendio de emociones variadas que pocos libros han conseguido producir en mí.

(Citas 1,7 y 9)


 

6. Los Organillos (Les pianes mecaniques)-Henry Francois Rey-(Ed. GP. Libros Reno-1969)

 

De este ejemplar no hay ninguna cita porque se extravió y no lo recuperé, pero sí que conservo sensaciones inolvidables de su lectura. Su protagonista, Vincent, viaja desde el sur de Francia a la Costa Brava para pasar una temporada en Caleya. Y ya durante el viaje en coche se respira la libertad y el desparpajo que serán ya la constante a lo largo de la novela. Las fiestas, los romances, las pasiones conforman un relato inolvidable. Con mi mirada de adolescente consideré esta novela como una joya por todas sus licencias que, en aquella época de pleno franquismo, estaban tildadas de libertinajes.

Como en otras muchas ocasiones, terminé enamorado de la protagonista, Jenny. Una mujer liberal y divertida pero también inteligente y culta, romántica y profunda. Lo tenía todo.

 

                                                                               

11 comentarios:

  1. Felicitaciones por lo largo y creible de tu increible entrada

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por pasarte y tener la paciencia de leer esta historia real.
      Saludos.

      Eliminar
  2. Fantástica e interesantísima. Gracias por compartir 👏🏼👏🏼👏🏼👏🏼

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias a ti Galilea por tu lectura y tu paciencia. U n abrazo

      Eliminar
  3. Me gusta leerte disfruto tus letras Te dejo un abrazo desde Miami y el sol

    ResponderEliminar
  4. Esto si es un tesoro. La hilerita de relatosbque bueno es hallarlos :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Jo, me alegra saber que te gustó. Saludos cordiales.

      Eliminar
  5. Te leo a diario
    Me pones al tanto con la vida

    ResponderEliminar
  6. mE VOY vENGO A DESPEDIRME DE LA CRUELDAD QUE SON LOS BLOGS mE LIBERO DE ELLOS
    aDIOS Y SUERTE AMIGO

    ResponderEliminar